Periodico El Mundo
5 de junio 1999
Señores:
¿Porqué mi iglesia me abandona? Yo he sido siempre un buen ciudadano, temeroso de Dios , católico practicante, esposo ejemplar y el mejor de los padres. Me casé enamorado y tuve 3 hijos a quienes crié y eduqué desde su nacimiento. La mayor parte del tiempo fui yo quien se levantó de noche a atender los niños cuando lloraban, yo quien los buscaba a la escuela y me aseguraba que hicieran sus tareas, yo quien los acompañaba a sus actividades de juegos y deportes. Si fui un padre de tiempo completo, ¿cómo es que ahora que mi esposa me fue infiel y optó por divorciarse, me delegan al papel de visitante de 4 días al mes? ¿Es que acaso los padres responsables tenemos que ser castigados y sacados abruptamente de la vida de nuestros hijos sólo por ser hombres? Las mujeres tienen miles de grupos e instituciones que las defienden, y los padres irresponsables les importa poco si se defienden o no sus derechos para con los hijos. Pero y los padres que amamos a nuestros hijos, ¿quién nos defiende?, ¿quién habla por nosotros?, ¿a quién realmente le importamos?
La Iglesia Católica promulga la unión familiar y el derecho de todo niño a crecer en un ambiente de paz, armonía y amor. ¿Porqué entonces esta misma Iglesia calla ante estos abusos judiciales contra los padres responsables? ¿Porqué mi Iglesia ignora el reclamo de este padre ejemplar que siempre ha conducido su vida por los caminos de Dios? ¿Porqué mi Iglesia se niega a defender los derechos de esos hijos del divorcio que lloran y se desesperan por no poder entender 'porqué papi ya no está con nosotros'?
Atentamente,
Agustín López
San Juan, PR 00936